miércoles, 4 de marzo de 2015

La no/solución


La solución no estaba en mis cafés, aun así los seguía tomando.
Tampoco en otras cosas que seguía consumiendo.
Autoconvencimiento para tomar otras iniciativas, 
se había convertido en algo normal hace ya muchos años.
De tantas partidas, llegue al punto de desconcertarme,
algo que naturalmente nos suele pasar a todos.
Si revisas con atención, sigo siendo el mismo.
Quizás un poco mas duro, 
es lo que nos sucede después de tantos golpes.
Me dijeron que debería concentrarme en otras cosas,
hay tanto que me llama la atención.
Intentas tener las cosas en orden,
pero nunca podrás convencer a todos los que quieres.
Eso lamentablemente te hace un buen y frágil blanco.
Dibujé ojos en mis manos, para intentar ver lo que escribía.
Me llene del sudor de quien no pretendía.
Y lloré, por encontrar calor con quien no quería.
Amo las historias de amor, aun así, estoy en duda.
Llega un punto en que conoces tanto a alguien, 
que ya te resulta indiferente.
Relajación en la música, con alguien que no conoces.
La configuración de nuestra mente y las interacciones externas
generan nuestro cortocircuito. 
No existe el destino y tampoco el karma.
No se cual es el sentido de la vida,
aún así podría darte mil conceptos recurrentes y todos reales.
Pero la única verdad, es vivir y morir.
Lo demás, causa y consecuencia. 
La realidad muere y vive en tu cabeza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario